No es raro que un animal ingiera veneno o sustancias tóxicas. Si su perro se comporta de manera anormal, o si lo ha visto ingerir una sustancia tóxica, deberá llevarlo de inmediato con un veterinario para darle tratamiento de emergencia, ya que puede haberse envenenado.
Si usted encuentra la sustancia ingerida, llévela con su veterinario para su exanimación, junto con muestras de vómito. Esto ayuda en el diagnóstico y plan de tratamiento.
Su mascota puede experimentar vómitos inexplicables, diarrea, o puede parecer débil (letargo), hasta el punto de ser incapaz de moverse.
La intoxicación por envenenamiento se produce cuando un perro ingiere material extraño, líquido o de otro tipo, que causa una reacción física. Si se deja sin tratamiento, puede ser fatal.
Los venenos y sustancias tóxicas vienen en muchas formas, y a menudo es difícil dar un diagnóstico exacto, si la sustancia no se conoce o se identifica. Si su veterinario no está seguro de lo que fue ingerido, los síntomas se trataran conforme se conviertan en obvios. Cuando sea posible, se ordenará un análisis de sangre para determinar la causa exacta de la intoxicación.
El objetivo del tratamiento es neutralizar la sustancia ingerida para evitar una mayor absorción en el cuerpo del perro, y también para proporcionar medidas de apoyo para su mascota. Cuando sea posible, se administrará un antídoto basado en lo que se haya ingerido.
Hay varias opciones de tratamiento para ayudar en la eliminación de la sustancia tóxica y la rehabilitación de su perro, incluyendo el apoyo afectivo para aliviar el dolor y el control de la temperatura del organismo.
Si su perro es incapaz de respirar, deberá establecerse rápidamente una vía de emergencia para evitar la asfixia. Si el corazón de su mascota se ha detenido, la reanimación cardiopulmonar (RCP) o un masaje del corazón (masaje cardiaco) pueden ser necesarios para recuperar un ritmo cardíaco adecuado.
El uso de enemas y carbón activado ayudarán a evitar una mayor absorción en el cuerpo, los aceites de uso externo puede ser usado para prevenir la absorción en la piel cuando la sustancia pasa a través del cuerpo.
Su veterinario también puede optar por un lavado gástrico (lavado interior). Se utiliza un tubo que llega hasta el estómago y se llena con agua para limpiar el sistema del perro, la sustancia se eliminará directamente del estómago. Los medicamentos diuréticos mejorarán la secreción de la sustancia a través del tracto urinario.
Para condiciones serias, el filtrado de los riñones con una máquina de diálisis puede ser recomendado para eliminar la sustancia de la sangre y los riñones del perro.
Usted tendrá que observar el progreso de su perro. Después del tratamiento, su veterinario seguirá vigilando a su mascota y determinará si su condición mejora o empeora. Las terapias de líquidos se recomiendan para mantener a su mascota debidamente hidratada.
El mejor método de prevención es mantener todas las sustancias dañinas fuera del alcance y de los alrededores de la casa.